Iglesia del Sagrado Corazón (Sacré-Coeur)
Si van andando, prepárense para una buena subida de calles empinadas; el último tramo es un funicular que salva al paseante de subir una buena cantidad de escalones (8 francos la subida y otros tantos la bajada).
La Iglesia del Sagrado Corazón es de estilo bizantino y sus cúpulas recuerdan al Taj Mahal hindú. Como dato curioso, la basílica fue edificada con piedra de Château-Landon (al sur-este de París) que bajo el efecto del agua de la lluvia segrega una substancia blanca parecida a la pintura; por ello, cuanto más llueve, más blanco es el Sacré-Coeur.
Además de contemplar un edificio fascinante (tanto por dentro como por fuera), junto a la Iglesia se encuentra uno de los lugares más parisinos y pintorescos de la ciudad: un diminuto barrio con una plaza amenizada por pintores que desarrollan su labor al aire libre y pequeños comercios de todo tipo, pensados principalmente para el turista.
7 € |