Notre Dame de la Garde
Es una Catredal dedicada a los pescadores, Notre Dame de la Garde es su patrona. Esta situada en la entrada del puerto, y esta, rodeada de esplendidos jardines.
La basílica de Nuestra Señora de la Guarda, popularmente conocida como «la Buena Madre», está situada sobre un colina a 150 metros sobre el nivel del mar y es otro de los lugares que ver en Marsella imprescindibles.
Esta iglesia construida a partir del 1853, destaca por su estilo neo-bizantino recubierta de mármol y pórfido proveniente de Italia y por una estatua dorada de 11 metros de la Virgen María que corona el campanario.
En su interior con mármoles de franjas blancas y rosadas y elaborados mosaicos?, sorprende por la presencia de exvotos, muchos dedicados por marineros agradecidos, y una decoración con maquetas de barcos colgadas de las bóvedas.
Además desde la iglesia tendrás las mejores vistas de Marsella con el Mediterráneo de fondo y disfrutarás de uno de los mejores atardeceres.